“Como motivación, siempre es posible ir más alto y más lejos. El contacto con la roca hace que nos convirtamos en mejores personas, y es por eso que los proyectos son la fuente de inspiración y aprendizaje”. Tiny Almada.
Originario de Chihuahua, México, ingeniero en electrónica, con una maestría en administración, Sergio Almada Barrera mejor conocido como “Tiny Almada”, es un joven aventurero amante de la exploración, la naturaleza y los terrenos verticales, su pasión, que paso a ser su estilo de vida.
Con más de la mitad de su vida dentro de la escalada en roca, Tiny Almada se desarrolla en diferentes estilos de escalada: Boulder, Deportiva, Tradicional y hasta Artificial.
BM: Sergio, platicanos un poco, ¿Cómo te defines?
ST: Soy una persona apasionada, es decir; me gusta hacer las cosas con interés, mente y corazón. Por igual, me considero explorador de la aventura, especialmente en la naturaleza. Lugar donde me he descubierto a mí mismo a través de la escalada, una persona capaz y segura que intenta seguir creciendo, aprendiendo y cuidando de nuestro planeta.
BM: ¿Cuándo te diste cuenta de que querías este estilo de vida?
ST: La escalada va más allá de solo subir piedras, cada vez que existe el contacto con la roca nos lleva a un estado mental absoluto, en donde solo pensamos aquello que estamos haciendo. Así como también las profundas relaciones que uno crea con los demás escaladores, especialmente con tu asegurador, al estarle confiando tu vida.
Eso nos produce un interés por seguir sintiendo eso, y comenzamos a llevar esos aprendizajes a otros ámbitos de la vida diaria, convirtiéndolo en un estilo de vida.
BM: ¿Qué es lo que Sergio Almada busca en una aventura?
TS: Una aventura no siempre tendrá que ser lo más difícil, sino aquello que nos produce la mayor felicidad mientras lo estamos realizando. Algo que nos hace salir de nuestra zona de confort para ayudarnos a crecer, aprender y superarnos para ser mejores personas.
BM: ¿Qué es lo que te lleva a decidirte por una aventura o proyecto concreto y descartar otros?
ST: En la escalada puede uno encontrarse muchas paredes a las cuales subirse. Para mí, antes de cualquier otro aspecto, lo primero que me llama es la estética de la línea, por igual si ha sido escalado antes o no. El llegar a lugares vírgenes es lo que más me llama.
Una vez decidido eso, vienen las logísticas y costos. Pero teniendo interés, uno puede lograr cosas grandes.
BM: Dime Sergio, ¿has llegado a conocer cuáles son tus límites?
ST: Sin duda, la escalada nos coloca en situaciones que nunca hemos vivido. Poniéndonos al borde de esos límites tanto físicos como mentales. Sin nunca olvidar que están hechos para expandirse, más no para romperse. Pues es ahí cuando podemos dejar este plano de tiempo.
BM: Qué es más importante en un desafío o aventura, ¿La fuerza física o la mental?
ST: Lo más importante en una aventura es sin duda nuestra mente. Puedes darte cuenta, que nuestro cuerpo es una máquina y puede hacer cosas que nunca creeríamos. Claro está que debe existir un balance entre lo físico y lo mental, hay que prepararse físicamente y entrenar nuestros cuerpos. Pero si no tenemos una mente fuerte, no lograremos tener el físico fuerte.
Hay una frase de un escalador que ejemplifica esto y dice: “Ningún entrenamiento tendrá un beneficio, si no haces en ti espacio para creer.” Arno Igner.
BM: ¿Cuál ha sido el mayor desafío o momento más difícil que has enfrentado?
ST: Ha habido momentos difíciles en la vida, la perdida de varios amigos cercanos y familiares. Nos enseñan y nos hacen ser más fuertes. Pero también en la escalada, he tenido un par de momentos… Uno que me ha hecho ver mi pasado en segundos, mientras abríamos la ruta de “Rastámuri” (1,000 mts) en la pared de la Cascada de Piedra Volada en Chihuahua, escalando, me he quedado bloqueado creyendo que si caigo pueda que no la cuente. Ahí es donde, sin espacio para pensar mal, he tenido que actuar y seguir haciendo lo mejor que puedo.
Y la segunda, cuando estuvimos 3 días encerrados por la lluvia en una pequeña carpa, colgados a 400 metros del piso. Siendo mi primera escalada de Gran Pared, no sabía que pensar, pasaron muchos tipos de ideas en mi cabeza con tanto tiempo. Hasta que finalmente al 4.º día todo se despejó, y terminamos la ruta de “Tehue” en El Gigante, luego estar 10 días en pared.
BM: ¿Cuál ha sido el mejor momento en tu vida y por qué?
ST: El mejor momento de mi vida… Es difícil contestar esta pregunta, pero pensándolo bien es el día que nací. Y aunque no tengamos esos recuerdos, estoy seguro de que el haber podido respirar y seguir respirando hasta hoy me hace apreciar más estar vivo. Poder estar presente día a día aprendiendo y expandiendo mis límites hacen que disfrute más de esto que llamamos vida.
BM: ¿Cómo estas experiencias te ayudan a crecer y superarte a ti mismo?
ST: Cuando alguien te dice que no puedes hacer algo, o hasta pasa por tu cabeza, que es algo casi imposible. Pero aun así te imaginas, te preparas, te entrenas, y lo proyectas; ahí es cuando uno crece y se da cuenta de que podemos hacer cosas increíbles. En la escalada es algo así… Desde que vez una pared, hasta que culminas con abrir una ruta en la misma. Sales como una mejor persona.
BM: ¿Quiénes han sido tu inspiración para seguir este camino?
ST: La inspiración tiene muchos canales… sin duda hay escaladores (profesionales o no) cuyo ejemplo aportan a esa inspiración por querer superarnos y hacer mejores cosas, no las tenemos que conocer personalmente, pero con quienes nos identificamos.
Aunque para mí tiene mayor peso la familia (mis padres y mi hermana) y en el mismo lugar mi pareja Sofía, quienes siempre están ahí. Y por supuesto la familia extendida, todos los escaladores y amigos con quienes convivimos día con día para apoyarnos, enseñarnos y convencernos de que podemos ser mejores si así nos lo proponemos.
BM: ¿Cuál es la lección más importante que te ha dado la vida de aventura?
ST: Una de las lecciones más grandes ha sido la de confiar en nosotros mismos, dejando un lado el Ego. Me parece que tenernos confianza, así como también creer en nosotros nos hace querer ser mejores personas todos los días. Otra lección es el respeto por la Madre Tierra, saber que es quien ha estado más tiempo aquí, y que si no la respetamos, ella tampoco lo hará con nosotros.
BM: ¿Cómo defines para ti el éxito y el fracaso?
ST: Es una balanza algo compleja… pero creo que si sabemos utilizarlo a nuestro favor, estas palabras puedes ser muy subjetivas. El éxito podría ser que todo resulte al plan y lo que tenías pensado, el subir y bajar de una pared con bien. El fracaso podría ser quizá que el plan no resulte con la cima, pero con subir y bajar con bien, para mí, es considerado un éxito también. La roca siempre estará ahí para intentarse las veces que sea. Y muchas veces los fracasos (mientras no nos quiten la vida) es lo que nos hace ser más exitosos.
Recuerda lo que Thomas A. Edison decía: “No fracasé, solo descubrí 999 maneras de como no hacer un foco.”
BM: ¿Qué lugar que no hayas visitado, es el que más deseas conocer o explorar?
ST: Este mundo es tan grande, que creo que no nos alcanzaría la vida para ir a todos esos lugares que nos gustaría conocer. Pero tampoco tenemos tanto tiempo; uno de mis proyectos de vida es el poder abrir una ruta en cada continente: América del Norte, América del Sur, Europa, África, Asia, Oceanía y Antártida. Hasta el momento van 4 en donde he podido escalar y abrir rutas, me falta: América del Sur, Oceanía y Antártida.
BM: Cuando no estás de viaje o explorando ¿Qué es lo que disfrutas hacer? ¿Qué pasatiempo tienes?
ST: No todo el tiempo es estar de expedición. Soy también Ingeniero en Electrónica, con una Maestría en Administración; y eso me ha ayudado a darle mejor forma a proyectos personales. Actualmente, llevo una empresa relacionada con el ecoturismo y escalada en Chihuahua (www.EscalaChi.com) en donde buscamos divulgar muchos temas relacionados con la escalada y el turismo de aventura. Doy cursos de escalada, así como también caminatas y recorridos en la hermosa Sierra de Chihuahua.
BM: Me gusta pasar tiempo con mi pareja, Sofía Quin, quien es muy buena para correr en la montaña (Trail Running – MountainRunning) , cosa que también hacemos juntos.
ST: Otros de mis pasatiempos son la creación de contenido, últimamente más fotografía. Y me gusta escribir de los desarrollos en este mundo de la escalada en roca y deportes de aventura.
BM: ¿En qué proyectos estás trabajando? ¿Cuál es el próximo desafío?
ST: El confinamiento ha hecho que estemos más cercanos a casa, y los proyectos han sido el seguir con el desarrollo de la Información topográfica de la escalada en Chihuahua. Así como también el seguir desarrollando sectores cercanos a Chihuahua para la escalada, como es el caso de San Antonio El Grande. Sin embargo, no hemos quitado la mira de hacer rutas más largas, y para finales de año buscamos el hacer varias rutas de 200 m de altura, en promedio, en la Sierra de Villa Ahumada. Luego, para entrando el año, será regresar a El Gigante, la pared vertical más alta de México, (900m) para intentar escalar en libre (sin caerse o colgarse del equipo) la ruta de Logical Progression.
BM: Sabemos que tienes mucho camino y vida por delante, pero ¿Cuál te gustaría que fuera tu legado en este mundo?
ST: “Uno está vivo mientras alguien nos recuerda…” cuando leí esta frase, me quedé preguntándome como poder hacer esto en un mundo como el de hoy. Y descubrí que a través de la escalada uno podía dejar su contribución y podía dar un ejemplo el cual más personas quisieran seguir. Y con lo que llevo de vida, me gustaría transmitir que la vida es muy corta, como para no expresar lo que sentimos y no hacer lo que queremos. Que los recursos son finitos, así como nuestra vida y no hay que desperdiciarlos, pues no sabemos cuándo será el último día.
BM: ¿Qué mensaje te gustaría compartir con nuestros lectores?
ST: Busca y descubre tu pasión, pues es lo que hará que seas feliz y quieras seguir creciendo como persona. No digo que la escalada sea el canal, ese lo es para mí. Pero lo que sí creo que al menos debemos intentar hacer 3 veces algo que nunca hayamos hecho: la 1.ª para vencer el miedo, la 2.ª para aprender cómo se hace y la 3.ª para saber si te gusta.