La BMW K 100, lanzada en 1983, fue un hito para BMW Motorrad al ser su primera moto con motor de cuatro cilindros en línea y refrigeración líquida. Apodada “Flying Brick” por su motor horizontal, rompió con la clásica configuración bóxer. Su motor de 987 cc producía unos 90 CV a 8,000 rpm, alcanzando cerca de 220 km/h, posicionándose fuerte en el segmento sport-touring.
Esta motocicleta destacó por su sistema de inyección electrónica Bosch LE-Jetronic, que mejoraba eficiencia y respuesta, junto a una caja de cinco velocidades y transmisión final por eje cardán, sello de bajo mantenimiento BMW. El motor formaba parte estructural del chasis, con suspensión delantera telescópica y trasera monobrazo Monolever, ofreciendo manejo estable y cómodo.
La gama incluía versiones estándar, RS deportiva, RT turística con mejor aerodinámica y LT lujosa para viajes largos. Fue pionera en ofrecer ABS opcional, reafirmando el compromiso con la seguridad. Reemplazada en 1992 por la K 1100, la K 100 dejó un legado de innovación, calidad y rendimiento que aún define a BMW Motorrad.