Creada por VTR y exprimida por Amelie Mooseder, la BMW R1200 R Spitfire imita a los aviones de la II Guerra Mundial y lleva incluso mandos de un avión de combate.
Seguro que los trabajadores del departamento de motos de BMW nunca podrían haber imaginado que una de las R1200 R que construyeron en 2017 acabaría convirtiéndose en una especie de avión de combate de la II Guerra Mundial, solo que sin alas. Así ha sido gracias a Dani Weidmann, responsable de VTR Customs, una empresa situada en Zúrich (Suiza) y dedicada a ‘tunear’ motos que lleva la competición y la artesanía en la sangre.
Weidmann, que de hecho tiene experiencia restaurando antiguos aviones de combate, recurrió al estudio de diseño francés Barbara Design con la petición de que hicieran un diseño inspirado en el de estos aeroplanos, lo que implicaba planchas de aluminio cromado, infinidad de remaches al estilo aeronáutico y una considerable rebaja de la carrocería. Para ello había además que rebajar la horquilla en 30 cm y eliminar la suspensión trasera, totalmente inadecuada para el uso al que se iba a someter la nueva creación.
Para dotarlo de un aura de autenticidad, los preparadores incorporaron incluso los relojes y palancas originales de un Spitfire, el mítico caza de la II Guerra Mundial. Y eso incluye un interruptor que hace que la R1200 R Spitfire lance llamaradas de hasta tres metros de longitud, dando una idea de su potencial e intimidando a quien trate de competir contra ella.
El motor empleado es el original, lo mismo que la caja de cambios, el basculante, las ruedas y los frenos. Eso sí, funciona con óxido nitroso para producir 170 CV, lo que unido a un embrague de competición y a una caja de cambios con control de tracción y ‘Launch Control’ convierten a esta espectacular moto de 206 kg en una máquina para competir en pruebas de aceleración. Para exprimirla cuentan con Amelie Mooseder, que de hecho ha sido piloto de fábrica de BMW Motorrad porque la marca bávara ha sido partícipe y corresponsable del desarrollo de esta moto única.
“Gracias a su extraordinaria simpatía y carisma natural, tiene una parte importante en la popularidad de nuestras motos y sobre todo en la diversión con lo que hacemos como VTR Customs”, afirma Weidmann. Pero Amelie no es solo un bello rostro que dé popularidad a la moto, sino también una piloto muy rápida.
¿Y dónde corre con ella?, te preguntarás. La respuesta está en las carreras del octavo de milla, que en partes de Europa como Italia, Francia, Alemania, etc. tienen bastante popularidad. Amelie es quizá el personaje más popular en este tipo de carreras y la que le ha hecho los 150 km a todo gas que marcan los antiguos relojes de avión que lleva la moto.
Pero ahora esta moto está en venta por parte de VTR Customs. Señal de que muy pronto Amelie tendrá un nuevo ejemplar, quizá incluso más espectacular, en el que montarse. Su precio, 75,231 euros (89,000 dólares al cambio). Seguro que no podrías encontrar un artilugio más bello para decorar en tu salón.