Reloj de carreras Monza con un cronógrafo Flyback y carbono forjado
En 1975, la Scuderia, del equipo de Fórmula Uno de Ferrari, vio su primera victoria en once años cuando el piloto Niki Lauda ganó el Campeonato de Pilotos y el Campeonato de Constructores. Para celebrarlo, el patrocinador relojero de Ferrari, Heuer, presentó su colección Monza al año siguiente, que lleva el nombre del legendario circuito de Monza en Italia. El Monza presentaba la primera caja recubierta de negro de Heuer, que se volvería muy popular entre los cronógrafos de carreras de la marca en esa década y a lo largo de los años 80.
Nunca tan popular como los otros modelos de Heuer, como el Carrera o el Mónaco, el Monza todavía ha ocupado un lugar en los corazones de los entusiastas de los relojes de carreras en todo el mundo por su diseño único, (originalmente una corona en el lado izquierdo y una subesfera a las 10 en punto). Sin embargo, esta semana, durante la LVMH Watch Week en Singapur, TAG Heuer presentó un renacimiento del Monza que es decididamente moderno.
Esta versión, impulsada por el movimiento interno Heuer Calibre 02, es un cronógrafo flyback con una esfera a través de la cual se puede ver. Con una esfera esqueletizada y material de carbono en su caja de 42 mm, el nuevo reloj llama la atención a primera vista y se distancia de las ofertas de inspiración vintage de los cronógrafos recientes de TAG Heuer. Sin embargo, también se mantiene fiel a la naturaleza experimental del Monza original.
