ANDREAS GIRSCHIK: CIRCUNNAVEGANDO POLONIA

La idea de viajar a Polonia me vino a la mente después de ver una película en la que estaba tan impresionado por el paisaje y sus enormes montañas, a su vez fue el refugio de mi padre por un tiempo en la segunda Guerra Mundial. Hasta este punto había estado cegado por la idea de que, después de la frontera de Alemania Oriental, Polonia era mayormente plano y había enormes campos de agricultura, entonces, decidí profundizar e investigar un poco más sobre Polonia.

La idea de viajar a Polonia me vino a la mente después de ver una película en la que estaba tan impresionado por el paisaje y sus enormes montañas, a su vez fue el refugio de mi padre por un tiempo en la segunda Guerra Mundial. Hasta este punto había estado cegado por la idea de que, después de la frontera de Alemania Oriental, Polonia era mayormente plano y había enormes campos de agricultura, entonces, decidí profundizar e investigar un poco más sobre Polonia. Al buscar fotos en Internet descubrí que hay varias cadenas montañosas a lo largo de la frontera con Checoslovaquia, Eslovenia y Ucrania. Comenzando en La Suiza Sajona (Alemania), siguiendo por las Montañas de los Gigantes, pasando los Altos Tatras y el Parque Nacional Beskides con frontera ucraniana.

Encontré mucha información en Internet y poco a poco mi ruta comenzó a tomar forma, ¡Curiosamente las ciudades polacas también tienen toneladas de Historia y hermosa Arquitectura!  La larga historia de Polonia y la influencia de los antiguos ocupantes todavía son visibles, a partir de 1990 cuando surge la caída del muro se ven cambios notables. La mayoría de la gente vive ahora en grandes ciudades como Warsar, Cracovia y otras más, por lo tanto, el campo sigue intacto.  Mi objetivo era circunnavegar la frontera de Polonia de sur a norte, pero no visitar las ciudades principales. El norte Polonia tiene 524 km de costa junto al Mar Báltico y encontré información sobre la importancia de visitar Masuria. Masuria es una zona en el noreste de Polonia con muchos lagos y paisajes.

Durante la Segunda Guerra Mundial Polonia fue muy importante para los alemanes, por esta razón se pueden encontrar una gran cantidad de puntos de interés en el sur y norte del país. Mi padre era un refugiado en ese momento y huyó con sus padres al sur de Polonia junto a la frontera con Checoslovaquia, por esta razón, mi punto de partida fue Liberec, en la época conocida como Reichenberg donde mi padre vivió durante un tiempo hasta que fue expulsado en 1945.

Los primeros 600 km entre mi ciudad actual y Liberec, los pasé en la autopista para cruzar de oeste a este lo más rápido posible. Salí de la autopista cerca de Dresden y tomé caminos laterales que pasaban por la Suiza Sajona para apreciar el paisaje en dirección a Liberec. Terminé teniendo que cambiar mi ruta inicial, ya que algunas de las carreteras laterales estaban cerradas debido a un incendio forestal.  Finalmente, me dirigí a Liberec y comencé a investigar dónde vivió mi padre. En sus registros él menciona la dirección “Sorgengasse 72”.

Al buscarlo en Google no había ninguna calle con ese nombre, pero, encontré una página donde se documentaban los cambios de los nombres. “Na Bide” era el nuevo nombre, llegando ahí, como mi padre lo describió, solo quedaba una escuela, ya que todos los demás edificios fueron modificados a edificios de paneles en la década de 1970. Así comenzó la mañana siguiente la verdadera aventura, la idea era conducir por carreteras secundarias a diferentes puntos de interés que tenía en mi agenda, y lo último en mi mente era llegar a tiempo. El primer momento fue cruzar la frontera con Polonia y visitar la ciudad de Karpacz. En Karpacz se puede encontrar la única Iglesia construida completamente de madera con un estilo noruego con dragones y serpientes, el campo era claro y el camino un poco accidentado con una curva tras otra. 

Siguiente paso, Swidnica la iglesia más grande hecha de madera en Europa, específicamente de madera, paja y arcilla. Desde el exterior no era tan espectacular, pero al entrar las pinturas acapararon mi atención y la cantidad de oro utilizado era sorprendente.  En 1648 debido a un contrato de paz, se dio la libertad religiosa en Polonia y se establecieron las únicas restricciones que los templos debían construirse fuera de la ciudad y solo en madera.  

Klodzko es una pequeña ciudad famosa por sus esculturas y edificios barrocos. Debajo del casco antiguo hay un camino de túnel que atravesé para llegar a la fortaleza que construyó Federico II. Después de este agradable recorrido era hora de encontrar un lugar para pasar la noche. Pero después de mirar el reloj todavía tenía bastantes horas antes del atardecer, decidí visitar Nysa, una ciudad cerca de una Fortaleza y encontré un alojamiento privado.

Después de visitar el centro de la ciudad con las torres, terminé el día con una deliciosa comida en el Bastión. A la mañana siguiente, conduje de Nysa a Gora Swietej Anny (Annaberg), un templo de peregrinos en la cima de la colina más alta de la zona, construido en el siglo XVIII por los franciscanos. En 1921 los insurgentes polacos lucharon contra los ocupantes alemanes para mantener el templo.

Auschwitz, como muchos saben, es un lugar muy conocido, cuyas raíces muestran los lados más oscuros de la historia alemana. La visita es un deber, Llegué a Oswiecim alrededor de las 10 de la mañana y muchos turistas de todo el mundo estaban allí visitando el museo. Tomé un tour en inglés, ya que este no tenía fila de espera. Auschwitz fue inicialmente un campo penal para prisioneros políticos polacos, pero con el tiempo los nacionalsocialistas cambiaron su penal al más grande y cruel campo de concentración del mundo. Me sentí muy avergonzado y triste y decidí no visitar Birkenau, el campo de exterminio con gas.  

Zakapone en el alto Tatra fue el siguiente punto de interés.  Finalmente, veré las montañas por las que vine. Salí de Auschwitz a las 4 pm y me dirigí hacia el sur Zakapone. Todavía quedaban 128 km por recorrer, era un día soleado y a medida que comencé a acercarme al sur, fue posible ver una montaña que se elevaba frente a mí, después de Nowy Targ, la autopista se fusionó en un solo carril y el tráfico comenzó a empeorarse delante de mí. Había encontrado un campamento y estaba llegando a las 7 pm, ¡Sorpresa!

¡El campamento estaba cerrado!, ya estaba oscureciendo, así que decidí buscar un hotel barato para pasar la noche, finalmente encontré una pequeña habitación fuera de Zakapone en una casa privada. En la esquina al llegar al RB & B vi el restaurante “Pollo” después de ocupar mi habitación, inmediatamente fui allí. El dueño es un chico holandés y así charlando con varias cervezas como me enseñaron los mexicanos y cómo se las arregla un holandés para perderse en Polonia, Zakapone.  Me dio varios consejos y me recomendó conducir a Eslovenia para tomar el teleférico para visitar el punto más alto del Tatra. 

Al día siguiente estaba nublado y no podía ver los picos de las montañas, pero conduje hasta Tratanska Lomnica para tomar el teleférico hacia las montañas. Era principalmente bosque, sin embargo, el viaje fue estupendo y el camino nuevamente curvilíneo. En la cima el sol estaba clareando y finalmente pude ver las montañas y el valle. ¡Este viaje fue precioso, ¡vale la pena recomendarlo!

Otra buena recomendación sería Krynica Zdroj. Tomé los caminos laterales a lo largo de un río para visitar esta ciudad. Al llegar al pueblo hubo un atasco de tráfico, vi muchos turistas y decidí seguir adelante y no parar.  La siguiente parada fue un templo de madera cerca de Sekowa. Esta iglesia era muy pequeña, con una colección de obras de arte, retablos y pinturas del siglo XVIII.

Después de una pequeña charla con la señora que amablemente me abrió la puerta de la iglesia y me compartió un poco de la historia del templo. Saliendo de ahí mi siguiente destinó era el Parque Nacional Biezczady, el parque está entre Eslovaquia y Ucrania, el punto sur de mi viaje. Por la población local el área se llama Cárpatos del Bosque, en mi alojamiento conocí a muchos excursionistas, que se habían ido a las 9 de la mañana siguiente. El paisaje era abrigado por el bosque en la base, y las colinas que se extendieron a mi paso, era completamente impresionante. Las carreteras como me gustan, con curvas y a veces parecía que yo era el único alrededor.

Al llegar a Sanok decidí conducir hacia el este en dirección a la frontera de Ucrania. Pasé Przemysl y en Jarostaw en una carretera rural con mucho tráfico, en Jarostaw decidí tomar de nuevo las carreteras secundarias en dirección a Zamoso donde había reservado el alojamiento para pasar la noche. Después del check-in en el hotel tenía curiosidad por visitar esta ciudad llamada “Padua del norte”.  Mis expectativas se cumplieron. En el siglo XVI Bernardo Morando fue el constructor y diseñador de esta ciudad para el gran canciller Zamoyski, mientras deambulaba por un pequeño callejón encontré la casa natal de Rosa Luxemburgo, tuve en Polonia un toque italiano, una experiencia agradable.

El objetivo de la mañana siguiente era tomar una pequeña carretera lateral a lo largo de Ucrania en dirección al norte. Cinco kilómetros antes de la frontera había muchos camiones y autos que estaban parados sin ningún movimiento, decidí rodearlos y al final vi que estaban esperando para cruzar a Ucrania. Mi camino lateral me había llevado a unos 500 metros al punto de control de Ucrania, tome la decisión de salirme apresuradamente, ya que por el momento debido a la invasión de Rusia a Ucrania la carretera se encontraba congestionada.

El camino estaba lleno de baches, me veía atrapado zigzagueando de un lado a otro, estaba tan tenso constantemente revisando la carretera que en un momento no logré esquivar un hoyo y la rueda del sidecar se golpeó tan fuerte que me ardió hasta el cuerpo. Momentos después el camino cambió, me relajé, y una ligera sonrisa me invadió después de pasar por esta etapa de mierda. Creo que fueron alrededor de 100 km y debo decir que fue una gran prueba de estrés para el sidecar. Ahora me preparo para la siguiente etapa, por Wlodawa decidí tomar otro camino hacia Biata Podlaska. En Wlodawa es donde se delimitan los pueblos de Ucrania, Polonia y Bielorrusia, como perdí mucho tiempo, decidí conducir por la carretera estatal 17, que es muy agradable de conducir e inicié el camino a Bialystok.  

Bialystok se llama “El Versalles del Norte”, por sus Palacios y jardines elegantes, se le llamaba anteriormente a Bialystok el Centro de Europa, ya que era donde se fundían las culturas polacas, alemanas, rusas y judías. Ludwick Zamenhof inventó el idioma “esperanto” para que la comunidad pudiera aprenderla fácil y comunicarse internacionalmente. Actualmente, el idioma se habla en casi todas las regiones de Europa, asociaciones, congresos y debates científicos y Literatura. En varias zonas de la ciudad se puede encontrar gente que habla este idioma, en general, una ciudad interesante con cafés y bares. 

De Bialystok a Elk tomé la carretera estatal 67 para cruzar la Masuria y llegar al “Wolfs Schanze”, donde Hitler tuvo su cuartel general en la Segunda Guerra Mundial y muy mencionado su atentado del 20 de julio de 1944. Muchos turistas visitan esta atracción.  Decidí no quedarme mucho tiempo y disfrutar del paisaje de Masuria. Para esto, tomé caminos laterales nuevamente a lo largo de los lagos y ríos que cruzan esta área, el objetivo final era llegar al Mar Báltico, Frombork y mi último destino para este día. 

A las 7 pm llegué a Frombork y todavía era hora de visitar el centro de la ciudad. Nikolas Copernicus  (DR. Astronomo y Matemático) vivió un tiempo en esta ciudad y aquí desarrolló la teoría que la Tierra y los demás Planetas giraban alrededor del Sol en un sistema heliocéntrico. N.C. se encuentra enterrado en la iglesia de la ciudad.

Malbork fue una de las atracciones que estaba muy entusiasmado con visitar, ya que tiene un gran Castillo de piedra roja majestuosamente atractivo, pero debido a la gran cantidad de turistas decidí omitirlo y disfrutar de la carretera costera del Mar Báltico. En verano, la zona del Mar Báltico es muy frecuentada. Por lo que a menudo me encontré atrapado en algún atasco de tráfico.  Buscar una ruta sin tráfico era realmente complicado y cuanto más me acercaba a las ciudades cercanas a la playa más aumentaba el tráfico. Finalmente, llegué a Kolobrzegn nada especial, muchos turistas en el paseo marítimo, algunos barcos turísticos regresan al puerto, esta fue la última noche en Polonia, y elegí un Restaurante mexicano como mi cena final.

A través de la carretera de la costa conduje a Usedom en Alemania, tuve que tomar un pequeño ferry para cruzar y después de unos kilómetros crucé la frontera. En Usedom traté de encontrar un camping, ya que los precios de los hoteles eran increíblemente altos.  En cada campamento que pase obtuve la misma respuesta, estamos llenos, en Karlshagen finalmente encontré un lugar para dos noches, fue horrible.

Por fin, iba a regresar a mi ciudad actual, elegí la autopista hacia Berlín y desde allí dirección Frankfurt. A unos 900 km llegué a mi casa por la tarde y estaba feliz de finalmente dormir en mi propia cama. Durante el viaje sentí un ligero dolor en la garganta, la prueba indicó que era Corona positivo. En general, ¡el Sidecar funcionó increíblemente bien!  Polonia es un país pintoresco, cultural y vale la pena visitarlo. 

En memorias a mi padre Manfred Girschik.

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